VALIOSA DECISIÓN

Y toda mi vida se resumió
En aquel instante
Para mi inolvidable
De la mas valiosa decisión.

En que dije con gran fervor
Creyendo con todo mi corazón
Te recibo en mi vida Señor
Toma todo lo que soy.

Y una inmensa Fe que no tenía
Ese momento alumbraría
Y mi existencia vacía
Completamente transformaría.

Llegó y que victoriosa lo logró
Y mucho mas pues conquistó
Cada territorio infértil y seco de mi interior,
Ahora solo vivo por gracia y por amor
Desde que su Santo Espíritu mi vida llenó.

Llenura divina que mi pensamiento inspira
Para escribir y dar testimonio verdadero
Con este humilde verso
De que su compasión y amor jamás termina.

OMAYRA SANCHEZ, LA LUCHA DE UNA GUERRERA

“Yo vivo porque tengo que vivir” 

OMAYRA SANCHEZ

Sus ganas de vivir

Sobrepasaban su edad,

Y su sabiduria permanecerá.

Omayra Sánchez fue una niña víctima del volcán Nevado del Ruiz durante la erupción que arraso al pueblo de Armero, Colombia en 1985 (más de 25.000 muertos de una población de 40.000 habitantes). Omayra estuvo 3 días atrapada en el fango, agua y restos de su propia casa. Tenía 13 años y durante el tiempo que se mantuvo atorada siempre estuvo encima de los cuerpos de sus familiares. 

No hubo quejas, ni reproches, ni llanto, ni desesperación.

Y nos quejamos,

Y maldecimos nuestro destino,

Y lloramos penas pasajeras,

Nos enfrascamos amargados

En vacios desesperados.

Ella nos ensaña algo:

"Las ganas de vivir, deben permanecer aún cuando toda esperanza se pierda"

Antes de quejarte

Piensa en OMAYRA

Y agradece a Dios

Por tantas bendiciones

Y sobre todo por tu larga vida.

Que permanezca esta reflexión

Dentro de tu corazón.

 http://www.youtube.com/watch?v=ZC9sGpExzPM

SIN TU PALABRA

Oscura y vacía estoy
Si aquí no está
Adentro en mi corazón 
Tu palabra de verdad.

Pierdo sentido, pierdo razón
Me pierdo yo...
Es tu mandamiento, tu voz
Mi norte mi dirección.

Encontrarme sin tu palabra 
Sería una tortura para mi alma
Morir en un desierto
En el que la agonía sobrepasa toda mente humana
Y el agua, inservible, la sed no calma.

Tal es mi anhelo por agradarte
Que tu palabra es mi cayado y mi baluarte
Simplemente lo mas, mas importante.

Meditar tu palabra es mi deleite
Creerla y declarla lo mas fuerte.
Para tener Fe y poder conocerte.